
Película que pone los pelos como escarpias, sobretodo al saber que está inspirada en un caso real. Desgraciadamente, la autocracia aún es posible en nuestra cómoda época democrática, y “La Ola” es el reflejo de ello. Con una sobria dirección y un reparto joven y efectivo, reafirma al cine alemán como uno de los más interesantes de la cinematografía europea.